Hace unos días que no escribo nada. Pero tampoco tengo muchas ganas. No puedo ni seguir la agenda diaria. Escindido sería la palabra. El sábado a la noche tenía un cumpleaños y me clavé una caipirinha en casa de mis viejos después de la pedorra pelea de narváez y el soplo de box de la tigresa, film zone apenas me estimuló con su erotismo de cuarta y así me dormí en el sillón: con la barba que no me afeito hasta dentro de un mes y medio y con la botella vacía de real caipirinha, en patas, con la cabeza en cambridge.
Y claro... fue cuelgue... olvido.
Pero pilas, que siempre le pusimos pilas... así que seremos pileros.
Feliz Día de la Madre, madres...
2 comentarios:
siiiiiiiiii, pilaaaaaaaaaas
En eso andamos, preciosa...
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