martes, marzo 28, 2006

Paseo y ataque al hígado

Ayer tuve resaca.
El domingo estuvimos tomando unas cervezas en San Telmo y quedé del orto. El hígado dijo basta, pero al ver a tanto extranjero suelto con billetes de colores y formas extrañas me quedé pensando en por qué no me puedo comprar una lámpara sin que me cobren como si la lámpara hubiera iluminado la capilla sixtina.
A veces pienso que es un poco al pedo. Pero por otro lado, con el hambre que hay, no puedo decir nada. Estuvimos caminando por la costanera sur y ese lugar es un circo. Hay de todo; malabaristas, magos, guitarristas, cumbiancheros, magos, payasos, el tipo que se pasea con la llama, el tipo que se pasea con el pony. Era muy gracioso porque veías al tipo y parecía un gaucho pero las zapatillas que tenía puestas me llevaban al Bronx. La caja de Pandora a pleno.

1 comentario:

Lunita dijo...

Tremenda caja de pandora resultó ser su hígado...